El habla del Campo de Gibraltar no es más que una variante
del andaluz, es decir lo que se denomina una variedad diatópica del andaluz,
que por la particularidad geográfica de
la zona, frontera con Gibraltar y próxima a las costas de África, adquiere una
cierta peculiaridad. El andaluz de esta zona se ha visto enriquecido por las aportaciones procedentes del cruce de los idiomas inglés y
del natural de Andalucía occidental. Además
hay que contar con la gran cantidad de expresiones árabes, tan común en Andalucía
pero que aquí adquieren especial relevancia. Es lógico deducir que de la misma manera que el inglés procedente
de Gibraltar ha influido de manera decisiva en la forma de hablar de esta parte
de la “verja” (este término es muy usado en toda la comarca para referirse al
la barrera que mantuvo separada a España de Gibraltar entre 1969 y 1982),
también el andaluz de este lado de la frontera ha marcado las características
de un inglés particularísimo, típico de Gibraltar, ofreciendo expresiones que
en muchos casos coinciden con las usadas en las poblaciones Españolas de la
comarca.
Por tanto y para entender mejor esta variedad diátopica del andaluz, es
conveniente analizar algunas de sus características propias, así como dar un
pequeño repaso a parte de su historia. De todas las modalidades del español, quizás el
andaluz es la única variedad que puede considerarse una modalidad dialectal
innovadora, de origen no directamente latino.
Sobre su denominación existe cierta polémica, lo único que
tenemos más o menos claro es que no es una lengua. Se ha hablado de dialecto,
aunque pocos lo sostienen. En general
se suele usar más los términos de “hablas andaluzas” o “modalidades andaluzas”,
debido a las diferencias que existen entre unas zonas y otras. Vamos a
analizar, sin extendernos demasiado, algunos rasgos del andaluz que en su mayoría comparte con el
habla de la zona del Campo de Gibraltar.
NIVEL FÓNICO: aspiración de la “h” (esporádico); rehilamiento del fonema /ch/ convertimos el único morfema africado en fricativo: “mushasho” ; neutralización de líquidas implosivas: “er cielo”, “arcarde”; caída de oclusivas sonoras intervocálicas: “miaja”, “graná”; aspiración de la –“s” final: “los otroh” o intermedia “pejeta”; apócope de la -“d” final: “verdá”; ceceo y seseo, se trata del mismo fenómeno, basado en la evolución de las silbantes, en castellano quedan como dos fonemas diferentes y en andaluz continua en evolución hacia un sólo fonema, ceceante o seseante, según la zona. Este quizás sea el rasgo diferenciador más relevante entre el castellano y la variedad andaluza . Es característico en la pronunciación del andaluz oriental la abertura que hace de las vocales. Esto se produce como compensación por la aspiración y pérdida de –“s” final de palabra
NIVEL FÓNICO: aspiración de la “h” (esporádico); rehilamiento del fonema /ch/ convertimos el único morfema africado en fricativo: “mushasho” ; neutralización de líquidas implosivas: “er cielo”, “arcarde”; caída de oclusivas sonoras intervocálicas: “miaja”, “graná”; aspiración de la –“s” final: “los otroh” o intermedia “pejeta”; apócope de la -“d” final: “verdá”; ceceo y seseo, se trata del mismo fenómeno, basado en la evolución de las silbantes, en castellano quedan como dos fonemas diferentes y en andaluz continua en evolución hacia un sólo fonema, ceceante o seseante, según la zona. Este quizás sea el rasgo diferenciador más relevante entre el castellano y la variedad andaluza . Es característico en la pronunciación del andaluz oriental la abertura que hace de las vocales. Esto se produce como compensación por la aspiración y pérdida de –“s” final de palabra
NIVEL MORFOSINTÁCTICO: cambio de género: “er
chinche”; tendencia a la desaparición de “vosotros”; uso de ustedes con
doble valor, de tratamiento de confianza y de respeto. Paralelamente se
sustituye "os" por "se".
NIVEL LÉXICO: el léxico andaluz conserva numerosos arcaísmos, arabismos, palabras de origen medieval, gitanismos y vocablos mozárabes, muchos de estos términos han desaparecido en el español común, aunque otros se siguen utilizando en muchas zonas de España. Hay que tener en cuenta que el léxico que utiliza cada hablante, depende tanto o más de las distintas variables situacionales (profesión, aficiones, temas de conversación….), que de cuestiones diátopicas. Después de todo lo expuesto observamos que los rasgos diferenciadores del andaluz con el castellano se localizan casi exclusivamente en el nivel fonético, puesto que los citados en el nivel morfosintáctico, son más bien vulgarismos o manifestaciones coloquiales de los hablantes de nivel culto o medio.
NIVEL LÉXICO: el léxico andaluz conserva numerosos arcaísmos, arabismos, palabras de origen medieval, gitanismos y vocablos mozárabes, muchos de estos términos han desaparecido en el español común, aunque otros se siguen utilizando en muchas zonas de España. Hay que tener en cuenta que el léxico que utiliza cada hablante, depende tanto o más de las distintas variables situacionales (profesión, aficiones, temas de conversación….), que de cuestiones diátopicas. Después de todo lo expuesto observamos que los rasgos diferenciadores del andaluz con el castellano se localizan casi exclusivamente en el nivel fonético, puesto que los citados en el nivel morfosintáctico, son más bien vulgarismos o manifestaciones coloquiales de los hablantes de nivel culto o medio.
Entonces... ¿el "llanito" es andaluz? ¿Qué opinas?
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